Los pájaros comiendo de las manos.

Nuestros niñas acaban de descubrir que alimentar a un pájaro con sus propias manos es muy divertido, pero para ello tienen que estar tranquilas, no hacer ruido y tener paciencia....

Llevamos a nuestras hijas Irene y Sofia al Royal Botanical Garden, en Burlington el domingo pasado. En realidad, salimos a almorzar pero vimos este sendero cerca del restaurante donde Niaz (el papá) solía ir a hacer fotos de aves. Él ya sabía que este era un lugar para mostrarles a nuestras hijas algunas experiencias nuevas.

Para este tipo de actividad, los niños deben ser valientes en el sentido de que cuando el pájaro se acerque a ti, si estás asustado y mueves las manos, se ira volando; entonces, antes de que los pájaros coman de tu mano, el animal vendrá y se irá un par de veces.

Para Irene (nuestra hija de 6 años) fue mucho más fácil entender que necesitaba ser paciente, no moverse y no hablar, así que consiguió que el pájaro comiera en su mano bastante rápido.

Pero nuestra hija pequeña Sofía (3 años) se tomó un poco más de tiempo para comprender que necesitaba tiempo para dejar que el pájaro viniera y comiera de su mano. Pero finalmente lo consiguió ...

Las niñas disfrutaron mucho de esto, también aprendieron mucho, y si los niños están felices, los padres también lo están.

Seguro que volveremos a ir, tal vez cuando haga mejor tiempo para que no necesiten guantes y llevaremos nuestra propia comida de pájaros; esta vez gente muy agradable les estaba dando algunos frutos secos para que pudieran utilizalos con los pájaros . Ahora sabemos que a las aves les gustan más las pipas de girasol, las nueces o cualquier fruto seco antes que otras semillas de aves.

Hablamos pronto, con más experiencias vividas desde los ojos de nuestras niñas.